Aprontate
bien mi china,
porque
hoy baila mi compadre.
Empaquetate
de nuevo
porque
nos vamos pa’l baile.
Hasé
las cosas ligero,
pa’
que no caigamos tarde,
que’l
hombre si ha preparao
y
la farra va a ser grande!...
Van
las hijas de ño Fausto,
de
Cleto y Nepomuceno,
y
también las de Nastasio
y
las gurisas de Pedro.
Hay
boteya engüelta en pasto,
y
la china de Leuterio
pasteles
ha preparao
di
una altura como serro!...
La
música va’star güeña
porque
si han tráido a Julián,
el
hijo de la Saberia,
que
capás es de tocar
hasta
que no ardan las velas
y
el sol comiense a asomar.
Hay
vermú, y hay caña güeña,
anís,
guindao y coña!...
También
mi han asigurao,
y
pue’ que sea sierto mesmo,
de
que va cáir al bailongo
con
la hija, el tano pulpero;
que
la gringuita ‘stá linda
y
mi ahijao, de lo güeno;
tiene
campo mi compadre,
y
el gringo, de plata un serro.
Mientra’hacen
l’acomodada,
pa’
despuntar la afisión,
truquiaremo’en
la cosina
con
el viejo Nicanor.
Algún
trago de lo güeno
y
ratos de lo mejor,
por
alguno que otro cuento
y
una güeña rilación.
Y
hasta que despunte’l día
pasteles
y simarrón.
Y
a lo mejor cái al baile
algún
bravo payador;
y
entre cantos y compuestos,
amores
y pericón
vamo’a
pasar de lo lindo
hasta
que levante’l sol.
Versos
de B.
Firpo y Firpo