jueves, 29 de mayo de 2014

LA ESPUELA DE JINETEAR

La espuela, un bagual azuza
cuando se las calza un hombre,
y tiene distintos nombres
que comúnmente se usan…
hay quienes la llaman “chuzas”
a lo largo y a lo ancho,
y desde la estancia al rancho
se le da a un nombre que encaja,
unos le llaman “rodajas”,
y otros le dicen los “ganchos”.

Yo hablo de la sencilla
espuela de los que montan…
siempre lista, siempre pronta
pa’ rayar pecho o costilla,
a la que se nombra “horquilla”
y todo se relaciona,
el lenguaje de la zona
te da nombres paralelos…
los “fierros” o los ”pihuelos”
las “picudas” o “lloronas”.

Quería nombrarte “espuela”
porque prendida a un garrón…
vos sos de la tradición,
la hija, la madre y la abuela,
con vos el valor nivela
la del “basto” y la “clinera”
te dicen las “chimangueras”
los “criques” como las “púas”,
y allá en la tierra charrúa
te llaman las “carancheras”…

Al herir una paleta
con el dolor que amalgama…
comúnmente se te llama,
los “grillos” o las “rosetas”,
frente a vos, cualquier sotreta
se agranda ante tus rigores…
y muchos animadores,
para darle más valor…
le dicen al montador
“-Alzalo en los tenedores”.

Con que valor te calzaron
jinetes de mucho oficio,
y en el garrón de un novicio,
vi que tus púas temblaron,
los poetas que te cantaron
te dieron su admiración,
porque amarrada a un talón
vas a seguir siendo espuela…
la hija, la madre y la abuela
de la gaucha tradición.


Versos de Jorge A. Soccodato

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