De noche suelo mirar
a las estrellas del
cielo
y el recuerdo de mi
abuelo
entra en mi alma a deambular
si me parece observar
su chata al tranco
marchando
y él tranquilo
manejando
sus caballos por la
huella
pero será alguna
estrella
porque él está
descansando.
Con su oficio de
carrero
por mil caminos rumbió
y más de uno me contó
que era un hombre muy
campero
de él yo soy heredero
su apellido me dejó
y porque Dios lo mandó
un día sin fe y sin
anhelo
partió en un viaje
hacia el cielo
del cual nunca
regresó.
Mi padre sabe contar
de su padre las
historias
y son aquellas
memorias
las que yo sé recordar
su nombre de Baltasar
en mi conserva el
candor
con nostalgias con
dolor
pienso si él viviría
que contento se
hallaría
con su nieto payador.
El tiempo que ha de
pasar
si me brinda el
regocijo
de que Dios me mande
un hijo
lo llamaré Baltasar
así el nombre ha de
quedar
engendrado en otro ser
será con tierno placer
un homenaje sincero
para mi abuelo carrero
que no pude conocer.
Versos de Patricio Somohano
No hay comentarios:
Publicar un comentario