Hoy le caigo de vesita
don Gumersindo Cepeda,
pues he notao que la rueda
de su chata, no transita.
Priocupao ya por sus cuita'
es que me yego a su rancho,
pues me ha comentao don Pancho
que un mensaje en la estafeta
sembró su campo `e roseta',
y ya no hay charque`n el gancho.
Quiero que sepa paisano
que cuenta con el apoyo
de'ste servidor ¡bien crioyo!
pa' echar un pial a un hermano.
Dejo atao mi yunta `e ruano'
a su más firme palenque.
Le digo que ni rebenque
va a tener que utilizar,
son domaos por Castelar
en la estancia "Los Enclenque".
Será maldita esa carta,
será maula la noticia,
será dura la primicia
que a cualesquier crioyo ensarta.
Le vengo a tirar la cuarta
porque usté se lo merece,
es gaucho que no carece
de bondá y de comprensión;
ricuerdo aqueya ucasión
que me sacó de un tropiece.
Lo he encontrao en la matera
papel y lápiz en mano,
quitando grano por grano
las penas de su sesera.
Es muy firme la testera
de su crioya cabezada,
que'n décimas bien armada'
usté ha sabido espresar,
gaucho... no se deje arriar
cómo borrego en majada.
Con esto amigo le digo
que vuelva enseguida al ruedo,
no caiga en su propio enriedo
que'l futuro no es castigo.
Con esto amigo le digo
que'nsiye de nuevo el moro,
el pingo se pone loro
si lo deja 'e galopiar,
cuando lo vaya a enfrenar
se va'a empacar como toro.
Versos de Alejandro Abriola
